«El inocente» es una película francesa dirigida por Simon Jaquemet, en la que se aborda la temática de las segundas oportunidades, el amor y la protección familiar.
La historia se centra en Abel, un joven que vive en una pequeña ciudad de Francia y cuya vida cambia radicalmente cuando descubre que su madre, Sylvie, está a punto de casarse con un hombre que se encuentra en la cárcel. Ante esta situación, Abel entra en pánico, pues teme que su madre esté en peligro.
Junto a su mejor amiga, Clémence, Abel se propone proteger a su madre de cualquier peligro que pudiera correr. Sin embargo, su encuentro con Michel, su nuevo padrastro, le ofrece a Abel nuevas perspectivas sobre la vida y el amor.
La película explora las complejas relaciones familiares y cómo, en ocasiones, nuestra percepción de las cosas puede estar equivocada. Abel, por ejemplo, se da cuenta de que su madre es una mujer fuerte e independiente, capaz de tomar sus propias decisiones y defenderse a sí misma.
En «El inocente», también se aborda el tema de la redención y la posibilidad de que las personas cambien. Michel, el padrastro de Abel, es un hombre que ha cometido errores en el pasado y que se encuentra en prisión. Sin embargo, la película nos muestra que, a pesar de sus errores, Michel es un hombre que ha aprendido de sus errores y que está dispuesto a hacer lo necesario para recuperar la confianza de los demás.
La película es una reflexión sobre la vida y las segundas oportunidades. La vida puede ser complicada y, en ocasiones, nos presenta situaciones difíciles de afrontar. Pero, como se muestra en la película, siempre hay una salida, siempre hay una posibilidad de cambiar las cosas y de encontrar la felicidad.
En definitiva, «El inocente» es una película emotiva y conmovedora, que nos invita a reflexionar sobre las relaciones familiares, el amor y la posibilidad de redención.